El análisis de malware consiste en examinar el software malicioso para comprender su comportamiento y su impacto. Esta guía explora los diferentes tipos de análisis de malware, incluidos los métodos estáticos y dinámicos.
Descubra la importancia del análisis de malware en la detección de amenazas y la respuesta a incidentes. Comprender el análisis de malware es fundamental para que las organizaciones mejoren sus capacidades de ciberseguridad.
 ¿Qué es el análisis de malware?
¿Qué es el análisis de malware?
 El análisis de malware examina y estudia el malware para comprender su comportamiento, capacidades e impactos potenciales. Esto se puede hacer manualmente, utilizando herramientas y técnicas para realizar ingeniería inversa y analizar el código, o utilizando herramientas automatizadas y plataformas de análisis para identificar y clasificar el malware. El análisis de malware es una parte esencial de la ciberseguridad y la respuesta a incidentes, ya que ayuda a identificar y comprender las amenazas de una organización y a desarrollar estrategias eficaces para defenderse de ellas.
El análisis de malware permite a su red clasificar los incidentes según su nivel de gravedad y descubrir indicadores de compromiso (IOC). También proporciona una imagen más completa de la búsqueda de amenazas y mejora las alertas y notificaciones de IOC.
Tipos de análisis de malware
El análisis de malware puede ser estático, dinámico o una combinación de ambos tipos. Cuando se utiliza el análisis estático, se examina el archivo en busca de signos de intención maliciosa, mientras que el análisis dinámico permite ejecutar el código sospechoso en un entorno sandbox. El uso de un entorno aislado aislará el malware de su sistema en vivo, eliminando la posibilidad de infectar su entorno de producción o permitir que el virus se escape a su red.
Casos de uso del análisis de malware
Gestión de incidentes de seguridad informática
En este caso, una organización ha determinado que es posible que se haya infiltrado malware en su red. Se envía un equipo de respuesta para hacer frente a la amenaza.
Realizan análisis de malware en archivos maliciosos y especifican el peligro y el tipo de malware. También analizan el impacto que probablemente tendrá en el sistema de la organización.
Investigación de malware
Los académicos o especialistas del sector pueden realizar investigaciones en profundidad sobre el malware. Estos profesionales tratan de comprender lo mejor posible cómo funciona determinado malware.
SentinelLabs ha examinado detenidamente, por ejemplo, la anatomía de TrickBot Cobalt Strike Ataques y conocimientos adquiridos sobre las cadenas de malware FIN7.
Este nivel de investigación y comprensión es vital para la ingeniería inversa del malware y requiere el análisis del malware, así como la prueba del malware en un entorno sandbox.
Extracción de indicadores de compromiso (IOC)
Los proveedores de productos y soluciones de software suelen realizar pruebas y análisis masivos para determinar los posibles IOC. A su vez, pueden mejorar su red de seguridad para corregir de forma preventiva los puntos débiles de su sistema.
Las etapas del análisis de malware
Hay cuatro pasos comunes en el análisis de malware que se vuelven más complejos y específicos a medida que se avanza en el proceso. Hay cuatro etapas principales:
1. Escaneo: análisis automatizado
Las herramientas totalmente automatizadas se basan en modelos de detección creados a partir del análisis de muestras de malware ya descubiertas en el mundo real. De este modo, estas herramientas pueden escanear archivos sospechosos y programas para determinar si se trata de malware.
El análisis automatizado también puede generar un informe detallado que incluye el tráfico de red, la actividad de los archivos y las claves del registro. Una herramienta como esta es el método más rápido y no requiere un analista.
Es adecuada para examinar grandes cantidades de malware y probar una red extensa. Por consiguiente, tampoco incluye tanta información.
2. Análisis de propiedades estáticas
Una vez completado el análisis, el análisis de propiedades estáticas examina detenidamente el malware. En esta fase, los analistas examinarían las propiedades estáticas de una amenaza sin ejecutar el malware. Esto es algo que se suele hacer en un entorno aislado o en un entorno de pruebas. Las propiedades estáticas incluyen hash, cadenas incrustadas, recursos incrustados e información de encabezado.
Herramientas como desensambladores y analizadores de red pueden obtener información sobre cómo funciona el malware en esta etapa.
3. Análisis de comportamiento interactivo
Para obtener más información, los analistas pueden ejecutar un archivo malicioso en un sistema de laboratorio aislado para ver sus efectos en acción.
El análisis de comportamiento interactivo permite al evaluador observar y comprender cómo el malware afecta al sistema, su registro, el sistema de archivos, los procesos y las actividades de red, y cómo alguien podría replicarlos.
Se puede configurar un entorno de prueba seguro descargando un software de virtualización para ejecutar un sistema operativo invitado. Probar el malware en un entorno aislado como este también se denomina análisis dinámico.
El gran reto que esto plantea es que el malware a menudo puede detectar cuándo se está ejecutando en una máquina virtual y alterar su comportamiento en consecuencia. El malware puede permanecer inactivo hasta que se cumplan determinadas condiciones.
Es posible adoptar un enfoque de análisis híbrido combinando métodos de análisis estático y dinámico.
4. Inversión manual del código
Por último, los analistas pueden invertir manualmente el código del archivo y descodificar cualquier dato cifrado almacenado en la muestra. Esto les permite determinar capacidades que no se mostraron durante el análisis de comportamiento y puede añadir información valiosa a los resultados.
En esta fase se necesitan herramientas adicionales, como depuradores y desensambladores.
Creación de un entorno de análisis de malware
Para un investigador de malware, crear el entorno adecuado para el análisis de malware es un paso crucial para analizar e investigar el malware de forma adecuada. Esto consiste en descargar, instalar y configurar una máquina virtual Windows 10 y REMnux Linux, configurar una red privada para la comunicación entre máquinas virtuales, crear un entorno Windows personalizado con SentinelLabs RevCore Tools y capturar el tráfico de una máquina virtual Windows 10.
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Más informaciónLas mejores herramientas de análisis de malware
Existen varios tipos diferentes de herramientas esenciales necesarias para realizar análisis de malware que le permitirán evitar y comprender los ciberataques. Aunque muchas de las herramientas que se enumeran aquí son gratuitas, las versiones de pago son muy recomendables en un entorno profesional.
Desensambladores: Un desensamblador, como IDA Pro o Ghidra, desarrollado por la Agencia de Seguridad Nacional (NSA), desmonta el código ensamblador en lugar de ejecutarlo, para que pueda ser analizado estáticamente. También funcionan con descompiladores, que pueden convertir el código binario en código nativo.
Depuradores: Un depurador, como x64dbg o Windbg, se utiliza para manipular la ejecución de un programa. Esto proporciona información sobre lo que ocurre cuando se ejecuta el malware y puede ayudarle a realizar ingeniería inversa en una muestra de malware para ver cómo funciona.
También permite a los analistas controlar áreas de la memoria del programa para comprender cómo afecta a una red.
Editores hexadecimales: Un editor hexadecimal, como HxD, es un editor especializado que puede abrir cualquier tipo de archivo y mostrar su contenido byte a byte. Esto se puede utilizar para descomponer completamente el malware y comenzar a traducir su código.
Monitores: Cuando necesite ver en tiempo real el sistema de archivos, el Registro y la actividad de los procesos/subprocesos, deberá utilizar una herramienta de monitorización avanzada como Process Monitor. Esta herramienta muestra un árbol de procesos que muestra las relaciones entre todos los procesos a los que se hace referencia en un rastreo y proporciona una captura fiable de los detalles del proceso.
Análisis PE: Herramientas como PeStudio, PE-bear y pefile son excelentes herramientas a tener en cuenta cuando se buscan herramientas gratuitas de reversión para archivos PE. Son útiles para visualizar el diseño de una sección PE y pueden ayudarle a detectar firmas de archivos, URL codificadas y direcciones IP.
Analizadores de red: Este tipo de software indica a los analistas cómo interactúa el malware con otros equipos. Puede mostrar las conexiones de la amenaza y los datos que intenta enviar.
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Preguntas frecuentes sobre análisis de malware
El análisis de malware es el proceso de examinar archivos sospechosos para comprender qué hacen y cómo funcionan. No se trata solo de ejecutar el código, sino de estudiarlo para descubrir su propósito, comportamiento y daño potencial. Los equipos de seguridad lo utilizan para identificar amenazas, desarrollar defensas y comprender cómo se propaga el malware a través de las redes. Es como desmontar un paquete sospechoso para ver qué hay dentro antes de que pueda causar daño.
El análisis de malware le ayuda a responder a los incidentes de forma más rápida y eficaz. Cuando se comprende cómo funciona el malware, se pueden identificar los sistemas infectados, contener la amenaza y prevenir futuros ataques. También ayuda a desarrollar mejores controles de seguridad y a formar al equipo para que reconozca amenazas similares.
Sin un análisis adecuado, es posible que se pase por alto malware oculto o que no se elimine por completo de la red.
Hay tres tipos principales: análisis estático, análisis dinámico y análisis híbrido. El análisis estático examina el código sin ejecutarlo: se observan las propiedades, las cadenas y la estructura del archivo. El análisis dinámico ejecuta el malware en un entorno sandbox seguro para observar lo que hace. El análisis híbrido combina ambos métodos para obtener una visión completa de las capacidades del malware.
Encontrar y formar analistas cualificados es el mayor reto: el 94 % de las organizaciones tienen dificultades para contratar personal. Las herramientas suelen carecer de automatización e integración, lo que hace que el análisis sea lento y propenso a errores.
El malware avanzado utiliza técnicas de ofuscación para ocultar su verdadero propósito, lo que dificulta el análisis estático. La presión del tiempo durante los incidentes también limita la profundidad con la que se pueden analizar los archivos sospechosos.
El análisis de malware ayuda a los responsables de la respuesta a incidentes a comprender el alcance y el impacto de un ataque. Permite identificar cómo entró el malware, qué hizo y qué sistemas se vieron afectados. Esta información sirve de guía para las tareas de contención y erradicación. El análisis también ayuda a desarrollar indicadores de compromiso para encontrar otros sistemas infectados y evitar la reinfección.
Puede analizar el malware utilizando herramientas automatizadas como entornos aislados para obtener resultados rápidos. Para un análisis más profundo, utilice desensambladores para examinar la estructura del código y depuradores para ver cómo se ejecuta. Los analizadores de red le ayudan a comprender cómo se comunica el malware con los servidores de comando y control. También puede utilizar SentinelOne para el análisis de malware.
El objetivo principal es comprender el comportamiento, las capacidades y el impacto del malware para poder defenderse de él. Es importante saber qué hace el malware, cómo se propaga y qué daños puede causar.
Esta información le ayuda a desarrollar firmas para la detección, crear parches para las vulnerabilidades y mejorar sus controles de seguridad. El objetivo final es siempre una mejor protección contra las amenazas actuales y futuras.

